Y LA LUCHA SIGUE

5 jul 2010

Los pobladores de Atenco reafirman el eje central de su lucha: la defensa de la tierra
Llaman a sumarse activamente a los movimientos de resistencia de electricistas y mineros
JAVIER SALINAS Y BLANCHE PETRICH
Corresponsal y enviada
Periódico La Jornada
Lunes 5 de julio de 2010, p. 17
San Salvador Atenco, Méx, 4 de julio. Con un maratónico festival, el pueblo de Atenco y los centenares de activistas de las organizaciones que apoyaron el movimiento por la liberación de los presos políticos, celebraron este domingo el fin de un capítulo y el principio de otro que tendrá como eje la defensa de la tierra, pero también la unidad con otros procesos de resistencia.
“Porque esto –exclamó el dirigente del Frente de Pueblos en Defensa de la Tierra (FPDT) y ex preso político Ignacio del Valle– ¡está pelón!” Y se quitó el sombrero para demostrar que no sólo se refería a la delicada situación nacional, sino a la pérdida de cabello que le provocaron los rigores de los cuatro años que pasó en el penal de máxima seguridad de La Palma, en Almoloya, estado de México.
La plana mayor del (FPDT) volvió a estar junta en el auditorio ejidal Emiliano Zapata, como en los viejos tiempos; como hace nueve años, cuando se resistía contra el decreto de expropiación de las tierras. Los líderes históricos Ignacio del Valle, Felipe Álvarez, Adán Espinosa, el asesor Héctor Galindo. Estaban también la llamada vieja guardia, veteranos como don Odilón, Cándido, Manuel y Francisco Alarcón, el último anciano que aún conserva el legado de la lengua náhuatl. Don Pancho, que también tiene el cargo tradicional zacapoaxtla de naco mayor, fue presentado como responsable de la sordera de los asistentes a este tipo de asambleas, ya que es operador de los cañones de pólvora que se detonan en son de júbilo o llamado de alerta.
Y también en el templete y en el micrófono estuvo el relevo, las mujeres que mantuvieron viva la cohesión de la organización durante el periodo de prisión: Trinidad Ramírez, Martha Pérez Pineda, Catalina González, Rosa Nelly Urrutia y tantas otras.
Presentes como estuvieron estos años recientes, los miembros del Comité de Libertad y Justicia para Atenco, en voz del actor Demián Bichir, anunciaron que ahora que se logró la razón de ser del grupo, éste no se disolverá sino que continuarán exigiendo a las autoridades y movilizando a la opinión pública con dos objetivos: lograr el retiro de cargos para que América del Valle, por el momento con una petición de asilo en la embajada de Venezuela, pueda moverse en libertad y volver al pueblo sin riesgo de ser arrestada. Y lograr que los funcionarios –hasta el más alto nivel– y policías que ordenaron y participaron en las violaciones, la tortura, el asesinato de dos jóvenes y el arresto ilegal de más de 200 personas el 3 y 4 de mayo de 2006 sean sometidos a juicio penal.
Recurrirán a tribunal internacional
“Si no se consigue al amparo del sistema de procuración de justicia de México –señaló el abogado Juan de Dios Hernández Monge– vamos a recurrir a la Corte Penal Internacional. Son crímenes de lesa humanidad que no deben quedar impunes.”
La lectura del pronunciamiento central del acto corrió a cargo de Trinidad Ramírez, interrumpida constantemente por gritos del auditorio: “América –del Valle–, te queremos en la calle”. En su comunicado, el FPDT expresó que sin querer ser triunfalistas, con el logro de la libertad de los últimos 12 presos de Atenco mandamos un mensaje: si nosotros lo hicimos por segunda vez, por qué no lo podemos hacer todos juntos.
Añadió que uno de los ejes del nuevo capítulo que ahora se inicia será participar con otros movimientos en México y en el mundo, grandes o pequeños, en la defensa de la tierra contra cualquier proyecto de despojo y en otras causas populares.
El otro eje, en el ámbito de los pueblos semirrurales de la cuenca de Texcoco, sometidos a intensas presiones del mercado para conseguir que los propietarios ancestrales de los terrenos los vendan a Comisión Nacional del Agua o a particulares, se involucren en proyectos alternativos continuando el proceso de autorganización en la región.
Los pobladores de Atenco, incluidos los recién liberados recibieron mensajes de aliento del ex obispo de San Cristóbal de las Casas Samuel Ruiz, de la senadora Rosario Ibarra de Piedra y del campamento de trabajadores del Sindicato Mexicano de Electricistas, en huelga de hambre. Del Valle pidió a las organizaciones presentes que asuman una actitud de cercanía activa con las luchas de los trabajadores electricistas y mineros.
Estuvieron presentes organizaciones de Oaxaca –en particular los triquis de San Juan Copala–, Puebla y Guerrero.
Destacó la participación de los padres de los cuatro mexicanos asesinados en Sucumbíos, Ecuador, en un bombardeo del ejército de Colombia; Servicios y Asesoría para la Paz; Mujeres sin Miedo, Jóvenes en Resistencia Monseñor Romero, y Comité Cerezo, entre otros.
El Estado no protege la vida en Oaxaca: eurodiputadas
El gobierno recibiría a Hassi y Keller después del proceso electoral
VÍCTOR BALLINAS
Periódico La Jornada
Lunes 5 de julio de 2010, p. 18
Las eurodiputadas Satu Hassi, ex ministra del Medio Ambiente de Finlandia, y Ska Keller, ex presidenta de la Federación de los Jóvenes Verdes Europeos, manifestaron ayer que en Oaxaca es muy claro que el Estado no cumple con su función básica de proteger la vida de sus ciudadanos.
Hassi y Keller, con la representación del Grupo de los Verdes del Parlamento Europeo en misión oficial, realizaron una visita a la ciudad de México y a Oaxaca para conocer el avance en las investigaciones de los asesinatos de la activista mexicana Beatriz Alberta Cariño y el observador finlandés Tyri Jaakkola.
“Nuestro interés –expusieron en entrevista– es tener testimonios de primera mano de los habitantes de San Juan Copala, hablar con funcionarios de los gobiernos federal y de Oaxaca; lamentablemente en este último se nos dijo que no podrían recibirnos, sino hasta después de concluido el proceso electoral”.
Consideraron que esto es inconcebible que ocurra en Finlandia. Si hay elecciones, el gobierno no se encierra ni deja de atender las demandas.
Las legisladoras señalaron que en las reuniones que sostuvieron en Oaxaca con varias víctimas, constataron que la situación que se vive en la región “va mucho más allá de un conflicto interno, como nos manifestaron funcionarios de la Procuraduría General de la República, de las secretarías de Relaciones Exteriores y de Gobernación.
Uno de los sobrevivientes de la emboscada en que asesinaron a Cariño y a Jaakkola, “nos manifestó que la distancia de la que venían los disparos no da lugar a dudas de que fueron hechos por gente entrenada. Testimonios que nos proporcionaron revelan que el gobierno estatal dio las órdenes.
“Las mujeres nos manifestaron en las entrevistas que tienen cuatro meses sin luz, y que son precisamente ellas quienes, aun exponiendo su vida, atraviesan el bosque para ir en busca de alimentos a otra comunidad. Incluso hablamos con un grupo de mujeres que denunciaron el secuestro de dos de sus compañeras.
Era un grupo de 30 mujeres que fueron a cobrar su ayuda contra la pobreza que les entrega Sedeso; sin embargo, dos que no reciben la ayuda se fueron a desayunar y resultaron secuestradas. Las otras 28 protestaron y lograron rescatar a sus compañeras. Esto ocurrió el 14 de mayo. Pero eso no es todo, refieren que luego de que el comandante les dijo que recibió órdenes de llevarlas a su comunidad escoltadas, no fue así, y que nueve mujeres fueron secuestradas y les robaron su ayuda contra la pobreza, así como sus alimentos.
Las eurodiputadas afirmaron: este ejemplo muestra el nivel más alto de sufrimiento. Es muy difícil entender que el Estado permita que ocurran cosas como ésta.
Hassi y Keller elaborarán un informe para el parlamento Europeo y para el gobierno mexicano, en el cual expondrán “las violaciones a derechos humanos que se viven en Oaxaca, no sólo en San Juan Copala, sino también en la capital del estado. La población nos decía ‘tenemos miedo’; ésa es la situación”.
En Durango y Veracruz, empate técnico; se perfila conflicto poselectoral
La redacción

MÉXICO, D.F., 5 de julio (Apro).- Las elecciones de gobernador en Durango y Veracruz resultaron las más competidas de los comicios efectuados ayer domingo, y en las dos entidades se perfilan conflictos poselectorales.
En Durango, el candidato del PRI, el Partido Verde y Nueva Alianza, Jorge Herrera Caldera tenía el 46.3 por ciento de los votos contra el 44.8 por ciento del aspirante de la alianza opositora PAN, PRD y Convergencia, José Rosas Aispuro Torres, es decir, apenas una ventaja del 1.5 por ciento.
Con el corte del PREP de las 6 horas de este lunes 5, Herrera sumaba 253 mil 957 votos contra 245 mil 4295 de Aispuro con el 86.9 por ciento de las casillas computadas.
Si el PT se hubiera sumado formalmente a esta alianza y no a unas horas de los comicios, el PRI se hubiera visto en desventaja porque los petistas suman el 4.2 por ciento de los sufragios, es decir, 22 mil 856 votos.
En Veracruz empezaron a fluir casi a la medianoche los resutados del PREP y con el corte hasta la 6 horas de este lunes, con el 52.03 por ciento de las casillas contabilizadas (el registro más bajo de las 12 elecciones de gobernador), Javier Duarte del PRI lleva el 44 por ciento de los sufragios contra el 41.2 del panista Miguel Ángel Yunes Linares, es decir, una ventaja del PRI del 2.9 por ciento.
De los 12 estados, donde se obtuvo la ventaja más amplia fue en Tamaulipas de 30.9 por ciento a favor del PRI.
Le siguió Quintana Roo con el 26.1, después Zacatecas con el 20.1, Chihuahua con el 13.9 y Puebla con el 11.4.
En los siete estados restantes la ventaja del ganador fue menor a los 10 dígitos. En Oaxaca de 8 puntos, en Tlaxcala lo fue del 7.8, en Sinaloa del 6.1, en Hidalgo de 5.1, en Aguascalientes de 4.8, en Veracruz del 2.9 y en Durango del 1.5.
La justicia
BERNARDO BÁTIZ V.
Hay una especie de epigrama que con frecuencia digo a quienes acuden a pedirme consejo jurídico, para que estén enterados de lo azaroso que es acudir a las autoridades judiciales a solicitar justicia; el epigrama pinta cual es la verdadera situación de la impartición de ella, no en México, como repiten algunos acomplejados, sino en el mundo entero.
Dice así: Para justicia alcanzar / tres cosas ha menester: / tener la razón, saberla pedir / y… que te la quieran dar.
Lo recordé con motivo de las resoluciones de la Suprema Corte en los casos de los presos de San Salvador Atenco, estado de México, y de los trabajadores de Luz y Fuerza del Centro. En un caso se alcanzó la justicia, con dificultad y después de un largo y tortuoso camino procesal, en el que hubo que vencer la resistencia e ineficacia de las autoridades del estado de México, que acusaron y condenaron a participantes en una movilización en defensa de la tierra y de la misma existencia de su comunidad.
Los trataron como si fueran una banda de secuestradores y criminales de la peor ralea y finalmente los sentenciaron a decenas de años, en algunos casos más de cien, que equivalen en la práctica, a prisión de por vida o cadena perpetua, pena tan alta que algunos legisladores despistados, pensando en quedar bien con sus electores, han aprobado en legislaciones locales y federales. Lo que se pretendía en el caso de este antiguo y valiente pueblo del estado de México no era suministrar justicia, sino venganza contra quienes, desde abajo, defendían lo suyo con desesperación y a veces, ante la cerrazón y el cinismo, con violencia.
La razón de los apresados en Atenco era tan clara que finalmente fueron escuchados y absueltos de cargos injustos. Qué bueno.
Los trabajadores del Sindicato Mexicano de Electricistas no han tenido esa suerte; tienen la razón, como dice el epigrama, la han sabido presentar mediante buenos abogados ante los tribunales, pero no se ha querido darles la razón.
Ciertamente, en cada caso que se plantea ante un juez hay al menos dos partes que tienen intereses encontrados y que pretenden ambas tener la razón de su lado. Al final, una quedará satisfecha con el fallo y la otra frustrada por perder el litigio de que fue parte; cuando los jueces son serios y convencen, ninguna de las dos partes podrá reclamar parcialidad o incapacidad. En México, es innegable que se ha avanzado en este campo, tanto en el Distrito Federal como en los tribunales de competencia federal, los locales para administrar justicia son decorosos, amplios y limpios; hace años que se abandonaron los edificios antiguos, algunos muy hermosos, pero improvisados de oficinas donde había muebles viejos y estantes desvencijados y hacinamiento de folios, expedientes y polvo.
También nos topamos hoy con una mejor preparación en los impartidores de justicia, que están constantemente en conferencias, foros y cursos de actualización; en especial cuando hay nuevas reglas que es necesario estudiar; abundan hoy entre los jueces y magistrados las maestrías y doctorados en derecho.
El punto débil, como se demostró en el caso Atenco, es que superviven jueces de consigna, que olvidan o renuncian a la independencia que deben tener; no se deciden a cambiar y, con temor reverencial al gobernador, resuelven como éste les insinúa, les pide abiertamente o en el peor (o mejor) de los caos, sentencian pensando en congraciarse con él. Casos similares podemos encontrar en muchas de las entidades que conforman la Federación.
Eso que se ve menos cada vez, pero que persiste, aunado a la falta de ética y a la impericia de muchos litigantes, complica las cosas para los pobres justiciables, como se ha dado en llamar a las partes en los procesos. A pesar de todo, casos como el de Ignacio del Valle y sus compañeros de lucha, primero, y luego de prisión, dan satisfacción y dan un respiro, nunca es demasiado tarde cuando se hace justicia.
Como dice el epigrama, no basta tener la razón, se requiere un planteamiento correcto, diligencia y actividad del profesionista del derecho que representa a los particulares; tener la razón y saberla pedir, a través de buenos abogados, da gran ventaja a quienes solicitan justicia; sin embargo, para alcanzarla plenamente, es indispensable que los jueces quieran otorgarla, no a su capricho, sino con base en las leyes vigentes y con libertad e independencia de criterio.
Elecciones 2010
Jorge Carrasco Araizaga

MÉXICO, D.F., 2 de julio (apro).- Derrotado en las elecciones intermedias de 2009, Felipe Calderón imprimió a los comicios del 4 de julio la animosidad que lo ha caracterizado como político.
Huérfano de legitimidad –como se lo recordó recientemente la presidenta del PRI, Beatriz Paredes–, carente de logros como gobernante e inmerso en la espiral de violencia que desató y ensangrentó el país, Calderón sabía que las elecciones en 14 estados de la República eran su última oportunidad para llegar con fuerza a su propia sucesión en el 2012.
Urgido de votos para el PAN, recurrió a las más burdas manipulaciones para obtener los votos que lo salven del fin anticipado de su presidencia.
Si las elecciones del año pasado se convirtieron en un plebiscito en el que el gran perdedor fue su partido tanto en el Congreso como en las elecciones estatales, las elecciones de 2010 terminaron siendo vitales para su futuro como presidente.
Un resultado adverso en estas elecciones para gobernador, congresos o presidencias municipales, lo hace todavía más débil políticamente.
Sin el control del Congreso de la Unión, con un PRI gobernando la mayoría del país y un PRD con el dominio político de la capital, se convertirá en lo que en la política estadunidense se caracteriza como un “pato cojo”, figura con la que se refieren al presidente que queda sin poder real al perder la última parte de su administración.
Pero en el caso de Calderón, el resultado sería todavía peor, pues quedaría más que nunca como rehén de los grupos que lo sostienen, especialmente los económicos y mediáticos.
Sólo de esa manera se puede entender que un presidente aparezca en las encuestas con un índice de aprobación cuando en las urnas es derrotado.
Para estas elecciones, Calderón recurrió a todo: la creación de vergonzosas alianzas con el PRD y Convergencia; el uso del aparato estatal para atacar a sus opositores; la movilización de sus secretarios en búsqueda desesperada de votos, y anuncios electoreros, como la eliminación parcial de la tenencia vehicular y una, también parcial, simplificación tributaria.
Como la violencia relacionada con la delincuencia organizada se ha convertido en el signo de su gobierno, el asesinato del candidato del PRI al gobierno de Tamaulipas, Ricardo Torre Cantú, le dio la oportunidad de hacer lo que en tres años y medio se había rehusado: hablar de una respuesta de Estado al avance incontenible de la delincuencia organizada en la vida pública del país.
Pero su discurso lleva una premisa explícita: que el Poder Legislativo avale lo que está haciendo, pues ha insistido en que su estrategia va bien. Difícilmente la cambiará en lo que resta de su sexenio, sobre todo si es el eje sobre el que ha girado su administración.
La respuesta del PRI no es de sorprender: “después de las elecciones hablamos”. Si en el 2006 le dio la mayoría en el Congreso para que entrara por la puerta de atrás al Palacio Legislativo de San Lázaro y protestara como presidente, esta vez le pasa la factura ante las filtraciones sobre los cacicazgos y corruptelas de los gobernantes priistas.
Un presidente débil, rehén y cortoplacista, un PAN desdibujado y un PRD que sólo entiende el poder como posiciones, han abierto espacios para que el PRI se vea de regreso a la presidencia de la República. La desgracia es que prácticamente es el mismo PRI corrupto y caciquil que perdió la presidencia de la República en el 2000.
Ahí están Ulises Ruiz, Fidel Herrera, Mario Marín y todos cuanto son rémoras de la democracia.
Con ese panorama político, no es gratuito que diez años de alternancia política –13 en el caso del DF– haya derivado en decepción y fastidio en amplios sectores de la sociedad mexicana.