JUAN MANUEL, LIBERADO.

18 feb 2010

LIBERADO.

Después de 16 meses en prisión, Juan Manuel Martínez Moreno, ha obtenido su liberación provisional.
Siendo las 11.30 de la mañana, acompañado de un numerosos contingente de la Sección XXII del SNTE se dirige en marcha hacia el zócalo de la ciudad de Oaxaca.
Martínez Moreno afirmó que sus convicciones se encuentran intactas y seguirá en la lucha.
Tortuoso camino a la libertad.
Periódico “Noticias”.
15 de octubre de 2008 La Procuraduría General de la República (PGR) ejercitó acción penal en contra de Juan Manuel Martínez Moreno por considerarlo probable responsable del homicidio de Bradley Roland Will.
16 de octubre de 2008 Juan Manuel Martínez Moreno fue aprehendido por agentes de la Agencia Federal de Investigación (AFI) de la PGR.
22 de octubre de 2008 El Juzgado Cuarto de lo Penal dictó auto de formal prisión en contra de Martínez Moreno por la probable comisión del delito de homicidio
18 de junio de 2009 El Juzgado Cuarto de lo Penal dicta un cuarto auto de formal prisión a Martínez Moreno.
30 de diciembre de 2009 El Juzgado Quinto de Distrito concedió el amparo a Martínez Moreno, en contra del auto de formal prisión dictado por el Juzgado Cuarto de lo Penal.
17 de febrero El Tribunal Colegiado en Materia Penal y Administrativa del Décimo Tercer Circuito confirma el amparo otorgado a Martínez Moreno por el Juzgado Quinto de Distrito, en contra del auto de formal prisión dictado por el Juzgado Cuarto de lo Penal y ordena su libertad.

Parametría: Si la elección fuera hoy ganaría Gabino Cuè
Escrito por Parametría
Jueves 18 de Febrero de 2010 09:14
Fuente Parametría. 18/02/10.¿Por qué el PRI está tan alterado con las alianzas estatales entre PAN y PRD? ¿Que llevó a la lideresa del PRI, Beatriz Paredes, a retomar el lema republicano español de "No pasarán", que es una arenga de vida o muerte en una guerra civil?
¿Renunció a su partido el Secretario de Gobernación solo por una de estas alianzas en un estado del sur del país? Sin ofender a mis a amigos oaxaqueños, ¿es tan importante Oaxaca como para que renuncié un Secretario de Gobernación, sólo por la posibilidad de un resultado electoral?
¿Por qué tanto escándalo si, según dicen todas las mediciones de opinión pública, la población, el ciudadano, el elector promedio, no quiere las alianzas?, ¿Será que la política no se mide en abstracto y tal vez la debemos de llevar a los espacios concretos donde se miden las opciones políticas?
Recientemente algunos investigadores de opinión hemos realizado mediciones donde intentamos evaluar el nivel de aceptación de las alianzas, en particular la del PRD y el PAN.

Y por los resultados de estas mediciones da la impresión de que las alianzas no son teóricas, ni están hechas de la misma materia. Las alianzas electorales obedecen a lugares y candidatos concretos y su aceptación depende de los electores propios de cada estado. Tal vez entonces, no es pertinente evaluarlas de manera general.
Han sido varios los espacios en los que, de acuerdo a encuestas, se muestra un rechazo generalizado a las alianzas. Lo señaló así la medición telefónica de BGC publicada por Excélsior. En tal ejercicio el 54% de los entrevistados expresó un rechazo a la posibilidad de que el PAN y el PRD hicieran una alianza electoral; un 53% dijo estar a disgusto con ellas.
Demotecnia, en Milenio publica una encuesta según la cual el 64% de los entrevistados consideraba un error las alianzas pactadas entre el PAN y el PRD, en la nota se infería incluso que la renuncia de Fernando Gómez Mont a la militancia panista era un reflejo de la equivocación del blanquiazul de aliarse con el sol azteca.
El Universal difunde su encuesta a propósito del tema. En ella se observa cómo 6 de cada 10 encuestados, de la población en general, manifiesta su rechazo a las alianzas electorales.De la misma manera Parametría realizó también un diagnóstico sobre las alianzas electorales. Los resultados son similares: el 46% de la población a nivel nacional dijo que no apoyaría una coalición en la que el partido político de su preferencia se aliara con otro al que no encontrase de su agrado.
Sin embargo, al analizar los datos por región o tipo de alianza comienzan a notarse diferencias sustantivas; por ejemplo, mientras en todo el país el rechazo a las alianzas es del 46%, en el DF -entidad con predisposiciones perredistas --es del 55%, casi 10 puntos porcentuales más de rechazo. Luego cuando a las alianzas se añade el nombre del partido político saltan a la vista otras diferencias. Por ejemplo, la alianza PAN-PRD enfrenta un mayor rechazo (41% nacional y 49% en el DF), que la del PRI-PVEM (28% nacional y 42% en el DF).Pero la mayor diferencia viene cuando la alianza se perfila en una perspectiva concreta: partidos involucrados, cargo a disputarse, entidad y, sobre todo, candidato. Tal vez un ejemplo ilustrativo de esto es el caso del polémico estado y alianza en Oaxaca.
Para la elección a gobernador de Oaxaca, Parametría hizo una encuesta en vivienda en la entidad, con candidatos y opciones de alianzas concretas. Los resultados del ejercicio sugieren que las mediciones serán más fáciles de evaluar para el elector en la medida que se apliquen a casos probables y no sólo hipotéticos. Mientras se evaluaron las posibles alianzas PAN-PRD-PT-Convergencia de un lado y PRI-PVEM del otro, la coalición priista se mantenía como el partido ganador en la preferencia electoral con un 54%, frente a un 43% de la unión opositora.
Cuando se incluyó el nombre de los posibles candidatos, las preferencias cambiaron radicalmente. La alianza PAN-PRD-PT-Convergencia pasa a ser ganadora (cuando menos con 5 puntos porcentuales de diferencia), si el abanderado de la coalición fuese el senador Gabino Cué. Con este candidato, la alianza tiene una preferencia electoral mayor a cualquiera de los posibles contrincantes, independientemente de las siglas que impulsaran su postulación.De tal manera que, cuando menos en Oaxaca, la alianza opositora que busca arrebatarle al PRI uno de sus estados más emblemáticos, se convierte en un contrincante muy competitivo a 5 meses de la elección. Muchas cosas están todavía por suceder en este estado, empezando por una campaña electoral, pero es bueno tener idea de cómo empieza la contienda. Medidas así las preferencias electorales, tiene sentido que se haya concretado la alianza del PAN y PRD en Durango y que en Puebla e Hidalgo, los mismos partidos mantengan negociaciones para intentar vencer al PRI en las próximas elecciones.
En un análisis prospectivo algunos analistas han sugerido que en el fondo lo que está de por medio es la posibilidad de que el PRI pudiera perder la presidencia del país en 2012. Si PAN y PRD llegan a tener una alianza en el Estado de México su mejor contendiente electoral a la presidencia Peña Nieto no podría ganar su estado y de esta manera quedaría descartado como candidato a Los Pinos. Todo esto es muy especulativo, pero no deja de ser una posibilidad, o por lo menos así parece que lo están evaluando los líderes de las tres principales fuerzas electorales del país.
Tip O´Neill, destacado demócrata en Massachusetts, afirmaba que la política no cobra sentido si no se lleva al terreno local, en este caso estatal. Que es allí donde cobra su dimensión y su peso. Tal vez en el tema de las alianzas electorales los dirigentes del PAN y PRD han tomado su máxima literalmente y es ahora que en nuestro proceso de vida democrática en México nos damos cuenta que "All politics are local".