¡LA TRANSFORMACION!
16 mar 2010
OAXACA ¿EL SATRAPA Y COMARILLA DESPLAZADOS?
Prensa Libre.- Guillermo Reyes.
El nombramiento como presidente del PRI estatal del senador de primera minoría, Adolfo Toledo Infanzón, parece ser culminación de un proceso de desplazamiento del tiranuelo Ulises Ruiz Ortiz (Gobernador aún, por gracia de la fuerza) y con él de su camarilla, del proceso electoral en ciernes, para la renovación de la gubernatura, diputación estatal y municipios.
¡Ah! Pero no confundirse, no ha sido dejado de lado en el dedazo. Es él quien nombra a los candidatos. Lo que ha hecho el PRI Nacional es apropiarse de la campaña electoral en la entidad y bajo esta óptica, hoy retornan a Oaxaca operadores políticos que vivieron prácticamente en el exilio en el sexenio anterior y parte de éste.
El PRI Nacional lo hace para evitar una debacle electoral segura si dejaba en manos de una camarilla desprestigiada política y socialmente, torpe en su proceder, pendenciera y hasta criminal en sus acciones. El PRI anticipa evitar el rechazo generalizado de la sociedad y eventualmente una polarización política que pudiera degenerar en el enfrentamiento violento en toda la entidad. Hay que recordar que los paramilitares de la pandilla en el poder, asesinaron a palos y pedradas a un profesor jubilado en la población de Huautla de Jiménez; pero después de de la experiencia del movimiento del 2006, intentar algo semejante no quedaría impune.
El PRI Nacional hace este desplazamiento en una jugada que emplea rostros diferentes para aparentar ante los ojos del electorado, tomar distancia del régimen despótico de Ulises Ruiz Ortiz, violador de la Constitución, de acuerdo con lo concluido por la Suprema Corte de la Nación.
Pero no, no es una ruptura de verdad, atrás del escenario y el maquillaje, son los intereses de la mancuerna Peña Nieto – Ulises Ruiz, los que prevalecen y permanecerán. Se trata simplemente de una mascarada táctica en el contexto de la elección.
Por otra parte, desde hace tiempo ya se ha puesto en operación una Elección de Estado a favor del casi seguro candidato priísta Eviel Pérez Magaña, mismo que se hace decir ingeniero. El PRI no puede darse el lujo de perder la elección, no tanto por la importancia de Oaxaca en el contexto nacional y con otras elecciones estatales en ciernes.
La importancia de las elecciones en Oaxaca para el PRI, descansa en evitar a toda costa que salgan a la luz pública el conjunto enorme de corruptelas del sexenio pasado y el actual. Que se difunda por ejemplo, la propiedad de dos hoteles en España, el condominio en Miami y que todos los oaxaqueños estén enterados de la propiedad del Hospital Sedna en la ciudad de México, calificado como de la más alta tecnología en tanto en Oaxaca sólo el 23% de la población es derechohabiente a los servicios públicos de salud.
En conclusión el PRI apuesta a que poniendo ante la luz a otros rostros, la ciudadanía oaxaqueña se vaya con el espejismo de que son otros y no los mismos que en décadas han sumido a la mayoría de oaxaqueños en la marginación y pobreza, en el desempleo y la inseguridad, en la carencia de recursos y el escandaloso enriquecimiento de la camarilla priísta. Y no, son la misma gata, pero maquillada.
Prensa Libre.- Guillermo Reyes.
El nombramiento como presidente del PRI estatal del senador de primera minoría, Adolfo Toledo Infanzón, parece ser culminación de un proceso de desplazamiento del tiranuelo Ulises Ruiz Ortiz (Gobernador aún, por gracia de la fuerza) y con él de su camarilla, del proceso electoral en ciernes, para la renovación de la gubernatura, diputación estatal y municipios.
¡Ah! Pero no confundirse, no ha sido dejado de lado en el dedazo. Es él quien nombra a los candidatos. Lo que ha hecho el PRI Nacional es apropiarse de la campaña electoral en la entidad y bajo esta óptica, hoy retornan a Oaxaca operadores políticos que vivieron prácticamente en el exilio en el sexenio anterior y parte de éste.
El PRI Nacional lo hace para evitar una debacle electoral segura si dejaba en manos de una camarilla desprestigiada política y socialmente, torpe en su proceder, pendenciera y hasta criminal en sus acciones. El PRI anticipa evitar el rechazo generalizado de la sociedad y eventualmente una polarización política que pudiera degenerar en el enfrentamiento violento en toda la entidad. Hay que recordar que los paramilitares de la pandilla en el poder, asesinaron a palos y pedradas a un profesor jubilado en la población de Huautla de Jiménez; pero después de de la experiencia del movimiento del 2006, intentar algo semejante no quedaría impune.
El PRI Nacional hace este desplazamiento en una jugada que emplea rostros diferentes para aparentar ante los ojos del electorado, tomar distancia del régimen despótico de Ulises Ruiz Ortiz, violador de la Constitución, de acuerdo con lo concluido por la Suprema Corte de la Nación.
Pero no, no es una ruptura de verdad, atrás del escenario y el maquillaje, son los intereses de la mancuerna Peña Nieto – Ulises Ruiz, los que prevalecen y permanecerán. Se trata simplemente de una mascarada táctica en el contexto de la elección.
Por otra parte, desde hace tiempo ya se ha puesto en operación una Elección de Estado a favor del casi seguro candidato priísta Eviel Pérez Magaña, mismo que se hace decir ingeniero. El PRI no puede darse el lujo de perder la elección, no tanto por la importancia de Oaxaca en el contexto nacional y con otras elecciones estatales en ciernes.
La importancia de las elecciones en Oaxaca para el PRI, descansa en evitar a toda costa que salgan a la luz pública el conjunto enorme de corruptelas del sexenio pasado y el actual. Que se difunda por ejemplo, la propiedad de dos hoteles en España, el condominio en Miami y que todos los oaxaqueños estén enterados de la propiedad del Hospital Sedna en la ciudad de México, calificado como de la más alta tecnología en tanto en Oaxaca sólo el 23% de la población es derechohabiente a los servicios públicos de salud.
En conclusión el PRI apuesta a que poniendo ante la luz a otros rostros, la ciudadanía oaxaqueña se vaya con el espejismo de que son otros y no los mismos que en décadas han sumido a la mayoría de oaxaqueños en la marginación y pobreza, en el desempleo y la inseguridad, en la carencia de recursos y el escandaloso enriquecimiento de la camarilla priísta. Y no, son la misma gata, pero maquillada.
¡Ah! Pero el ungido con el dedazo de Ulises, habla de "borrón y cuenta nueva". Y no señor, hay muchas cuentas pendientes con el pueblo de Oaxaca, no sólo de parte del sátrapa, sino del prinosaurio que lo encumbro y lo defiende, ese que fiel a su actuación borreguil lo acepta como candidato. No señor, en Oaxaca NI PERDON NI OLVIDO.